El mundo es esclavo de lo que calla.

domingo, 20 de septiembre de 2009

Amarga satisfacción.

La satisfacción de saber que te superaste, que afrontaste tus miedos y tus inseguridades por los demás es lo más importante; la sonrisa en tu cara, fruto de ayudar a tus amigos. Pero todo el esfuerzo que hiciste no es motivo de festejo, solo estuvo bien, y nada más. ¿Por qué tienen que idolatrar a la gente que hace las cosas como es debido? Sin embargo queda adentro tuyo la ilusión de un merecido reconocimiento...Vos sabés que trabajaste muchísimo para llegar a donde estás, y pareciera que a los otros no les cuesta nada. Y es ahí cuando pensas: -¿Estoy exagerando, me estoy volviendo loca?.
Cerrás los ojos y querés que el problema pase, se vaya.. No entendés porque estás ahí parada siguiendo instrucciones que no te complacen. Obligándote a vos misma a pasar por cosas que no querés y que como bien sabes, no te hacen bien.
Vos te conoces, y tenes idea de las cosas que te gustan y las que no. Entonces ¿Es un sacrificio justificado o un capricho tuyo? Llamalo como quieras, para ellos solo significa que les fallaste, que no los apoyaste cuando lo necesitaban. Y ahí lo único que vale es tu decisión. Lo que hagas bien va a costarte cada gota de sangre, y lo que hagas mal va a pesar en tu conciencia. Elegí ¿Que castigo preferís?

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Ellos dicen: